La Mennulara. Simonetta Agnello Hornby.

     La Mennulara es, bajo mi punto de vista, uno de esos libros que pasan por las librerías sin pena ni gloria pero que, a quien le da la oportunidad de salir de las estanterías, le sorprende y atrapa muy gratamente.

    

     En la Sicilia rural de los años sesenta, concretamente en Roccacolomba, fallece a finales de septiembre María Rosalía Inzerillo, conocida por todos como la Mennulara por haber sido en su niñez recolectora de almendras.

     La noticia corre como un reguero de pólvora por las calles del pueblo sin dejar indiferente a nadie y el aire se llena de cuchicheos, suposiciones y rumores.

     Odiada por unos y venerada por otros, la Mannulara entró a trabajar con trece años al servicio de una de las familias más importantes de la zona, los Alfallipe y sin que nadie sepa cómo ni por qué, al final de su vida era la administradora de todos los bienes de sus señores.

     A través de los murmullos de la gente nos vamos a ir enterando de la vida de tan misterioso personaje, conoceremos su carácter sobrio, su temperamento fuerte y la lealtad casi enfermiza que profesó a sus amos. Sabremos más de la familia a la que sirvió y poco a poco descubriremos que la Mannurala guardaba secretos que tal vez sería mejor enterrar con ella.

     Un libro que engancha desde el primer momento y que retrata maravillosamente el ambiente opresivo de los pueblos de la Sicilia profunda donde los dedos largos de la mafia llegan a todas partes.

     Yo lo descubrí hace algunos años y desde entonces lo he prestado y recomendado infinidad de veces. Disfruté muchísimo con él y descubrí a una autora que siempre consigue intrigarte y mantener el misterio durante cada página de sus libros.

     Mi favorito, sin duda, es este. Tal vez por su ambientación o quizás porque en otros me pareció que el secreto no era para tanto. El caso es que el personaje principal de esta novela, sin aparecer en ningún momento puesto que acaba de fallecer, llena toda la historia y está siempre presente como una figura de un tremendo magnetismo.

     Está bastante bien escrito y es ameno y fácil de leer entre otras cosas porque es una novela coral en la que cada vecino de Roccacolomba tiene algo que decir.

     Si buscáis un libro un poco diferente, que os cuente una buena historia y que os haga pasar un rato entretenido sin poder despegaros del sofá y de sus páginas, creo que en La Mennulara podéis encontrarlo.